7 días 7: llegué con escepticismo e indiferencia, mi cabeza proyectaba una isla paradisíaca megafotografiada y sobreexplotada y nada más lejos de la realidad, e incluso agravado por la cantidad de castellano que mis oídos escuchaban provenientes de… españoles!! Esto parece Conil en temporada alta 😏Pero lo que en un principio iban a ser 3/4 días de relax antes de lo realmente esperado, la magia los alargó para vivir unos momentos realmente increíbles.
No me había ni planteado hacer el «Open Water» de submarinismo, ni por aproximación tenía ligera idea de lo que este mundo significaba, pero gracias a las ganas que Marta me transmitió y a lo que se respira del mundo «dive» en la isla, conseguí el carnet internacional SSI para poder descubrir el mundo submarino en cualquier parte del mundo.
En la agencia nos juntaron con 3 vascos, uno de ellos el propio instructor, y a cada cual persona más grande, coincidir con gente así cuando estás lejos de casa hace que la magia de los viajes se multiplique exponencialmente. Hicimos 5 inmersiones, una de ellas de 18 metros, y las sensaciones en todo momento fueron simplemente espeluznantes: tener todo bajo control cuando sólo tienes agua y fauna marina alrededor es algo realmente indescriptible, gracias a Imanol (instructor de «Puravida») por transmitirnos tanta seguridad, confianza y tranquilidad en todo momento, por lo que ha sido una experiencia a todas luces recomendable.
La isla no es muy grande, manejable alquilando alguna motocicleta en la gran cantidad de sitios que te la ofrecen, así que en un primer momento con Marta y luego con mis «compidives» Iker y Sebas descubrimos sitios de postal y seguimos viviendo momentos cercanos.
Así los 7 días, momento en el que cada uno continúa su camino: Marta regresa a España, Iker previa parada en Bangkok también, Sebas continúa sin prisa en la isla «haciendo tiempo» hasta que llegue su «chavala» en los próximos días, y Patricia y yo, los únicos que en un principio teníamos previsto continuar juntos, hemos decidido hacerlo por separado dados los planes divergentes que han florecido en estas 2 semanas desde el comienzo.
Y aquí estoy, haciendo la noche en un crucero/barco de carga dirección Surat Thani para disfrutar de un día en Krabi antes de tomar vuelo hacia el norte de Tailandia, Chiang Mai.
Y aunque en Krabi pocas horas…